Presentación
La vida de los otros (Das
Leben der Anderen) es un película alemana ganadora del Óscar a la Mejor
Película Extranjera en 2007, que supuso el debut como guionista y director de
Florian Henckel von Donnersmarck. Asimismo fue galardonada con siete premios
Deutscher Filmpreis (Premios del cine alemán) y fue candidata a los Globos de
Oro en la Categoría de Película extranjera.
La película
transcurre en el Berlín Oriental, comunista, durante los últimos años de existencia
de la RDA (República Democrática Alemana, bajo el dominio de la URSS) y muestra
el control ejercido por la policía secreta (Stasi) sobre los círculos
intelectuales. Fue estrenada en Alemania el 23 de marzo de 2006, y en España el
16 de febrero de 2007.
Argumento.- Gerd Wiesler (Ulrich
Mühe) es un capitán de la policía política de la RDA, la Stasi. 100.000 agentes
y 300.000 informantes vigilan cada día la vida de sus compatriotas. En 1984 el
superintendente Anton Grubitz (Ulrich Tukur) le encarga a Wiesler que espíe al
escritor Georg Dreyman (Sebastian Koch) y a la popular actriz Christa-Maria
Sieland (Martina Gedeck). Su vida va a cambiar a partir de entonces.
El capitán
Gerd Wiesler es un oficial extremadamente competente de la Stasi, la todopoderosa
policía secreta del régimen comunista de la antigua República Democrática
Alemana, pero conforme va pasando el tiempo, la soledad de su trabajo (largas
horas solo en el piso superior al que habita la pareja a la que vigila, en
especial al escritor, a quien por su trabajo de libre pensador el Estado lo
considera una seria amenaza) comenzarán a afectarle de un modo que no podría
predecir. De esa forma comienza a fijarse en la amante esposa, que en verdad
mantiene una relación extraconyugal (no del todo consentida) con un ministro
del partido, para asegurar así que su marido no sea ejecutado al igual que
otros escritores. Wiesler, en un principio dispuesto a encontrar la más mínima
pista que delate sus intenciones de derrocar al gobierno o huir de país, se
percata a lo largo de la misión de la corrupción y el despotismo del régimen en
el que vive y que alcanza incluso a sus propios amigos y superiores, y viendo
mermada la fe en su propio gobierno, decide jugar a dos bandos siguiendo con la
misión pero proporcionando datos falsos al estado.
Por su parte,
el escritor trama efectivamente planes junto a sus amigos, que se precipitan
cuando el ministro, ante la negativa de Christa de continuar con su relación,
ordena un registro en busca de pruebas. Wiesler, enterado a última hora,
consigue ocultarlas de la casa del escritor sin que ni ella ni Georg se
enteren, pero esto provoca un ataque de pánico de ella, quien pensando que en
efecto los van a detener y llevan a una prisión para torturarlos, sale huyendo,
siendo atropellada por un coche. Sólo entonces Wiesler (quien en fugaces
ocasiones había hablado con ella, sin revelar jamás ni su identidad ni su
pasión por ella) le confiesa la verdad sobre las pruebas ocultadas justo antes
de morir. Grubitz, sabedor de la traición de su mejor agente y amigo, lo
condena al departamento de correo, donde abre la correspondencia de la gente en
busca de pruebas de traición o intento de huida (una prueba más del régimen
comunista y su despótica forma de vigilancia) hasta que años después, tras la
caída del Muro de Berlín, Weisler deja el cargo y se convierte en un simple
cartero.
Georg, en un
Berlín post-Guerra Fría, se encuentra con Grubitz tras ver una obra de teatro,
descubriendo que él no era diferente y que estaba bajo vigilancia al igual que
todos los demás. Esto le lleva a indagar en los archivos estatales y a conocer
la identidad de su vigilante, aunque solo por su número de referencia. Con los
datos recopilados escribe un libro dedicado a su ángel custodio que, tras su
publicación, éste encuentra en una librería cualquiera. Decidido a comprarlo,
entra para llevarse un ejemplar. El librero, mientras lo factura, le pregunta a
él si lo envuelve para regalo y Weisler, en un doble juego de palabras,
contesta escuetamente: "Es para mí".
Presentación
La vida de los otros (Das Leben der Anderen) es un película alemana ganadora del Óscar a la Mejor Película Extranjera en 2007, que supuso el debut como guionista y director de Florian Henckel von Donnersmarck. Asimismo fue galardonada con siete premios Deutscher Filmpreis (Premios del cine alemán) y fue candidata a los Globos de Oro en la Categoría de Película extranjera.
La película transcurre en el Berlín Oriental, comunista, durante los últimos años de existencia de la RDA (República Democrática Alemana, bajo el dominio de la URSS) y muestra el control ejercido por la policía secreta (Stasi) sobre los círculos intelectuales. Fue estrenada en Alemania el 23 de marzo de 2006, y en España el 16 de febrero de 2007.
Argumento.- Gerd Wiesler (Ulrich Mühe)
es un capitán de la policía política de la RDA, la Stasi. 100.000
agentes y 300.000 informantes vigilan cada día la vida de sus
compatriotas. En 1984 el superintendente Anton Grubitz (Ulrich Tukur)
le encarga a Wiesler que espíe al escritor Georg Dreyman (Sebastian
Koch) y a la popular actriz Christa-Maria Sieland (Martina Gedeck). Su vida va a cambiar a partir de entonces.
El
capitán Gerd Wiesler es un oficial extremadamente competente de la
Stasi, la todopoderosa policía secreta del régimen comunista de la
antigua República Democrática Alemana, pero conforme va pasando el
tiempo, la soledad de su trabajo (largas horas solo en el piso superior
al que habita la pareja a la que vigila, en especial al escritor, a
quien por su trabajo de libre pensador el Estado lo considera una seria
amenaza) comenzarán a afectarle de un modo que no podría predecir. De
esa forma comienza a fijarse en la amante esposa, que en verdad mantiene
una relación extraconyugal (no del todo consentida) con un ministro del
partido, para asegurar así que su marido no sea ejecutado al igual que
otros escritores. Wiesler, en un principio dispuesto a encontrar la más
mínima pista que delate sus intenciones de derrocar al gobierno o huir
de país, se percata a lo largo de la misión de la corrupción y el
despotismo del régimen en el que vive y que alcanza incluso a sus
propios amigos y superiores, y viendo mermada la fe en su propio
gobierno, decide jugar a dos bandos siguiendo con la misión pero
proporcionando datos falsos al estado.
Por
su parte, el escritor trama efectivamente planes junto a sus amigos,
que se precipitan cuando el ministro, ante la negativa de Christa de
continuar con su relación, ordena un registro en busca de pruebas.
Wiesler, enterado a última hora, consigue ocultarlas de la casa del
escritor sin que ni ella ni Georg se enteren, pero esto provoca un
ataque de pánico de ella, quien pensando que en efecto los van a detener
y llevan a una prisión para torturarlos, sale huyendo, siendo
atropellada por un coche. Sólo entonces Wiesler (quien en fugaces
ocasiones había hablado con ella, sin revelar jamás ni su identidad ni
su pasión por ella) le confiesa la verdad sobre las pruebas ocultadas
justo antes de morir. Grubitz, sabedor de la traición de su mejor agente
y amigo, lo condena al departamento de correo, donde abre la
correspondencia de la gente en busca de pruebas de traición o intento de
huida (una prueba más del régimen comunista y su despótica forma de
vigilancia) hasta que años después, tras la caída del Muro de Berlín,
Weisler deja el cargo y se convierte en un simple cartero.
Georg,
en un Berlín post-Guerra Fría, se encuentra con Grubitz tras ver una
obra de teatro, descubriendo que él no era diferente y que estaba bajo
vigilancia al igual que todos los demás. Esto le lleva a indagar en los
archivos estatales y a conocer la identidad de su vigilante, aunque solo
por su número de referencia. Con los datos recopilados escribe un libro
dedicado a su ángel custodio que, tras su publicación, éste encuentra
en una librería cualquiera. Decidido a comprarlo, entra para llevarse un
ejemplar. El librero, mientras lo factura, le pregunta a él si lo
envuelve para regalo y Weisler, en un doble juego de palabras, contesta
escuetamente: "Es para mí".
Leer más: http://filosofaralos16.webnode.es/el-sentido-de-la-vida/la-vida-de-los-otros-guion-de-la-pelicula/
Presentación
La vida de los otros (Das Leben der Anderen) es un película alemana ganadora del Óscar a la Mejor Película Extranjera en 2007, que supuso el debut como guionista y director de Florian Henckel von Donnersmarck. Asimismo fue galardonada con siete premios Deutscher Filmpreis (Premios del cine alemán) y fue candidata a los Globos de Oro en la Categoría de Película extranjera.
La película transcurre en el Berlín Oriental, comunista, durante los últimos años de existencia de la RDA (República Democrática Alemana, bajo el dominio de la URSS) y muestra el control ejercido por la policía secreta (Stasi) sobre los círculos intelectuales. Fue estrenada en Alemania el 23 de marzo de 2006, y en España el 16 de febrero de 2007.
Argumento.- Gerd Wiesler (Ulrich Mühe)
es un capitán de la policía política de la RDA, la Stasi. 100.000
agentes y 300.000 informantes vigilan cada día la vida de sus
compatriotas. En 1984 el superintendente Anton Grubitz (Ulrich Tukur)
le encarga a Wiesler que espíe al escritor Georg Dreyman (Sebastian
Koch) y a la popular actriz Christa-Maria Sieland (Martina Gedeck). Su vida va a cambiar a partir de entonces.
El
capitán Gerd Wiesler es un oficial extremadamente competente de la
Stasi, la todopoderosa policía secreta del régimen comunista de la
antigua República Democrática Alemana, pero conforme va pasando el
tiempo, la soledad de su trabajo (largas horas solo en el piso superior
al que habita la pareja a la que vigila, en especial al escritor, a
quien por su trabajo de libre pensador el Estado lo considera una seria
amenaza) comenzarán a afectarle de un modo que no podría predecir. De
esa forma comienza a fijarse en la amante esposa, que en verdad mantiene
una relación extraconyugal (no del todo consentida) con un ministro del
partido, para asegurar así que su marido no sea ejecutado al igual que
otros escritores. Wiesler, en un principio dispuesto a encontrar la más
mínima pista que delate sus intenciones de derrocar al gobierno o huir
de país, se percata a lo largo de la misión de la corrupción y el
despotismo del régimen en el que vive y que alcanza incluso a sus
propios amigos y superiores, y viendo mermada la fe en su propio
gobierno, decide jugar a dos bandos siguiendo con la misión pero
proporcionando datos falsos al estado.
Por
su parte, el escritor trama efectivamente planes junto a sus amigos,
que se precipitan cuando el ministro, ante la negativa de Christa de
continuar con su relación, ordena un registro en busca de pruebas.
Wiesler, enterado a última hora, consigue ocultarlas de la casa del
escritor sin que ni ella ni Georg se enteren, pero esto provoca un
ataque de pánico de ella, quien pensando que en efecto los van a detener
y llevan a una prisión para torturarlos, sale huyendo, siendo
atropellada por un coche. Sólo entonces Wiesler (quien en fugaces
ocasiones había hablado con ella, sin revelar jamás ni su identidad ni
su pasión por ella) le confiesa la verdad sobre las pruebas ocultadas
justo antes de morir. Grubitz, sabedor de la traición de su mejor agente
y amigo, lo condena al departamento de correo, donde abre la
correspondencia de la gente en busca de pruebas de traición o intento de
huida (una prueba más del régimen comunista y su despótica forma de
vigilancia) hasta que años después, tras la caída del Muro de Berlín,
Weisler deja el cargo y se convierte en un simple cartero.
Georg,
en un Berlín post-Guerra Fría, se encuentra con Grubitz tras ver una
obra de teatro, descubriendo que él no era diferente y que estaba bajo
vigilancia al igual que todos los demás. Esto le lleva a indagar en los
archivos estatales y a conocer la identidad de su vigilante, aunque solo
por su número de referencia. Con los datos recopilados escribe un libro
dedicado a su ángel custodio que, tras su publicación, éste encuentra
en una librería cualquiera. Decidido a comprarlo, entra para llevarse un
ejemplar. El librero, mientras lo factura, le pregunta a él si lo
envuelve para regalo y Weisler, en un doble juego de palabras, contesta
escuetamente: "Es para mí".
Leer más: http://filosofaralos16.webnode.es/el-sentido-de-la-vida/la-vida-de-los-otros-guion-de-la-pelicula/
Presentación
La vida de los otros (Das Leben der Anderen) es un película alemana ganadora del Óscar a la Mejor Película Extranjera en 2007, que supuso el debut como guionista y director de Florian Henckel von Donnersmarck. Asimismo fue galardonada con siete premios Deutscher Filmpreis (Premios del cine alemán) y fue candidata a los Globos de Oro en la Categoría de Película extranjera.
La película transcurre en el Berlín Oriental, comunista, durante los últimos años de existencia de la RDA (República Democrática Alemana, bajo el dominio de la URSS) y muestra el control ejercido por la policía secreta (Stasi) sobre los círculos intelectuales. Fue estrenada en Alemania el 23 de marzo de 2006, y en España el 16 de febrero de 2007.
Argumento.- Gerd Wiesler (Ulrich Mühe)
es un capitán de la policía política de la RDA, la Stasi. 100.000
agentes y 300.000 informantes vigilan cada día la vida de sus
compatriotas. En 1984 el superintendente Anton Grubitz (Ulrich Tukur)
le encarga a Wiesler que espíe al escritor Georg Dreyman (Sebastian
Koch) y a la popular actriz Christa-Maria Sieland (Martina Gedeck). Su vida va a cambiar a partir de entonces.
El
capitán Gerd Wiesler es un oficial extremadamente competente de la
Stasi, la todopoderosa policía secreta del régimen comunista de la
antigua República Democrática Alemana, pero conforme va pasando el
tiempo, la soledad de su trabajo (largas horas solo en el piso superior
al que habita la pareja a la que vigila, en especial al escritor, a
quien por su trabajo de libre pensador el Estado lo considera una seria
amenaza) comenzarán a afectarle de un modo que no podría predecir. De
esa forma comienza a fijarse en la amante esposa, que en verdad mantiene
una relación extraconyugal (no del todo consentida) con un ministro del
partido, para asegurar así que su marido no sea ejecutado al igual que
otros escritores. Wiesler, en un principio dispuesto a encontrar la más
mínima pista que delate sus intenciones de derrocar al gobierno o huir
de país, se percata a lo largo de la misión de la corrupción y el
despotismo del régimen en el que vive y que alcanza incluso a sus
propios amigos y superiores, y viendo mermada la fe en su propio
gobierno, decide jugar a dos bandos siguiendo con la misión pero
proporcionando datos falsos al estado.
Por
su parte, el escritor trama efectivamente planes junto a sus amigos,
que se precipitan cuando el ministro, ante la negativa de Christa de
continuar con su relación, ordena un registro en busca de pruebas.
Wiesler, enterado a última hora, consigue ocultarlas de la casa del
escritor sin que ni ella ni Georg se enteren, pero esto provoca un
ataque de pánico de ella, quien pensando que en efecto los van a detener
y llevan a una prisión para torturarlos, sale huyendo, siendo
atropellada por un coche. Sólo entonces Wiesler (quien en fugaces
ocasiones había hablado con ella, sin revelar jamás ni su identidad ni
su pasión por ella) le confiesa la verdad sobre las pruebas ocultadas
justo antes de morir. Grubitz, sabedor de la traición de su mejor agente
y amigo, lo condena al departamento de correo, donde abre la
correspondencia de la gente en busca de pruebas de traición o intento de
huida (una prueba más del régimen comunista y su despótica forma de
vigilancia) hasta que años después, tras la caída del Muro de Berlín,
Weisler deja el cargo y se convierte en un simple cartero.
Georg,
en un Berlín post-Guerra Fría, se encuentra con Grubitz tras ver una
obra de teatro, descubriendo que él no era diferente y que estaba bajo
vigilancia al igual que todos los demás. Esto le lleva a indagar en los
archivos estatales y a conocer la identidad de su vigilante, aunque solo
por su número de referencia. Con los datos recopilados escribe un libro
dedicado a su ángel custodio que, tras su publicación, éste encuentra
en una librería cualquiera. Decidido a comprarlo, entra para llevarse un
ejemplar. El librero, mientras lo factura, le pregunta a él si lo
envuelve para regalo y Weisler, en un doble juego de palabras, contesta
escuetamente: "Es para mí".
Leer más: http://filosofaralos16.webnode.es/el-sentido-de-la-vida/la-vida-de-los-otros-guion-de-la-pelicula/